sábado, 5 de diciembre de 2009

El camino más corto ya no pasa por Burgos

Una de las consecuencias que tuvo la creación y configuración de la región autonómica del Duero fue la pérdida de centralidad de Burgos. Cuando el gobierno central mira hacia arriba ya no ve a Burgos como meta inmediata en su camino al norte de España sino que una misteriosa fuerza gravitatoria surgida de una ley de sedes desvía hacia el oeste toda infraestructura que intenta cruzar el páramo castellano-leonés.

La autovía A-1 es el ejemplo de un diseño lógico y racional. Surgida del desdoblamiento de la N-I, es un proyecto gestado en las decadas de los sesenta y setenta (Plan Redia, Plan Nacional de Autopistas) y realizada entre los ochenta y noventa, anterior a la consolidación del estado autonómico, es decir, en un contexto de igualdad provincial. Es el camino más corto para que la capital de España se pueda comunicar con el norte del pais y el resto de Europa.

De la misma manera y 83 años atrás alguien pensó que hacer un viaje de Madrid a Bilbao pasando por el recorrido decimonónico de Ávila y Valladolid no era el mejor trayecto e ideó un itinerario directo pasando por Aranda y Burgos y desde allí hacia Miranda o París. Su inauguración en 1968 fue todo un acontecimiento y su enlace con la linea Santander-Mediterraneo podría haber sido una gran alegría de no haberse quedado esta linea por construir a escasos kilómetros de la capital montañesa.

Queda comprobado así que la rótula sobre la que pibota Madrid con el norte de España y suroeste de Europa se llama Burgos. Pero hete aquí que, tras el surgimiento de la taifa castellano-leonesa, Burgos ya no comienza a ser tratada como una pieza de España sino como una pieza de una pieza del puzzle español. A partir de entonces es con la autonomía de paso con quien hay que negociar y Valladolid es la voz cantante en nuestro caso. Muchos pensábamos que la continuación lógica de la A-1 sería también hacia Santander utilizando el puerto del Escudo y enlazando las dos capitales, vertebrando así la provincia de arriba a abajo, desde las Merindades hasta la Ribera y beneficiando a cántabros y madrileños en sus periplos hacia la capital y el cantábrico respectivamente. Un ejemplar del ABC de 1992 da buena cuenta de ello y destaca cual era la mejor opción:

http://hemeroteca.abc.es/nav/Navigate.exe/hemeroteca/madrid/abc/1992/11/14/069.html

Lo que nunca nos hubiésemos imaginado entonces es el escenario ante el cual estamos hoy; la "autovía de la Meseta" va directamente hacia Valladolid pasando por Aguilar de Campoo y Palencia y, desde Burgos, se está construyendo otra autovía, la A-73, que enlazará la capital castellana con Aguilar siguiendo la curva de la N-623. Más kilómetros para el cuerpo. La Montaña de Burgos será conocida desde ahora como la Montaña de Valladolid. Y adiós a la vertebración de la provincia.

Por si fuera poco aun faltaba la puntilla; el tren de alta velocidad. Reconocida Valladolid como capital y epicentro de la autonomía, el ejecutivo central primero socialista con Borrell en Obras Públicas empieza a estudiar en 1993 los itinerarios para un futuro tren de altas prestaciones que una Madrid con las comunidades autónomas del norte. Y si Castilla y León es Valladolid y Valladolid es Castilla y León lo demás no existe, por tanto, el objetivo es enlazar capitales al paso: Madrid-Valladolid-Vitoria. Impulsada por José María Aznar, quien la calificó como "una de sus obras más queridas", se diseña así una vía de alta velocidad que obliga a burgaleses, billbainos o vitorianos a dar un gran rodeo de casi 100 km y 40 minutos más de trayecto a diferencia de una alternativa de alta velocidad que pasara por Aranda. En contraste con este esfuerzo que se nos demanda para llegar a Madrid, el recorrido hacia Valladolid se sirve en bandeja de plata; se construye un costosísimo túnel de 28 km bajo el Guadarrama descartando otras alternativas y su itinerario se dirije exclusivamente a la capital del Pisuerga adelantándose al cruce ferroviario de Medina del Campo y obligando a crear otro ramal en Olmedo que acerca el itinerario levemente más a Madrid. Me imagino a Aznar y a Lucas sentados en una mesa el uno frente al otro negociando el paso del AVE por Castilla-León. De escalofríos.

Cuestión de tiempo, de distancia,... y de dinero. Porque el hecho de darnos un paseo por Palencia, Valladolid y Segovia no nos va a salir gratis a los burgaleses. Comparando precios por kilometraje con las otras lineas de alta velocidad, un futuro trayecto de ida y vuelta de Burgos a Madrid nos saldrá por el módico precio de más de 120 euros. De haber existido una linea de alta velocidad directa de Madrid a Burgos de unos 230 kilómetros de longitud calculo que saldría por unos 80 euros o poco más. En estos dos mapas se muestra la red planteada para la alta velocidad en España y lo que debería ser por sentido común, sobretodo en el caso de que tuviésemos una provincia, digamos, más nuestra:



Con un AVE de Madrid a Burgos no sólo se benefician muchas capitales del norte sino que además comunicamos las tres capitales burgalesas y vertebramos España de norte a sur, de Santander a Algeciras pasando por Aranda de Duero, la cual está condenada con el actual modelo a ver pasar poco a poco sus últimos vagones de tren.

En estas ponencias de dos profesores de ingeniería del terreno de la UBU se explica el por qué de la necesidad de un AVE Burgos-Santander y las consecuencias que traerán sobre el directo Madrid-Burgos su construcción por Burgos o por Palencia aunque las últimas noticias ya dan cuenta que llegamos tarde pues el proyecto de la vía por Palencia y Alar va ya hacia adelante.

http://www2.ubu.es/caict/ingterr/Inquietudes.pdf

http://www2.ubu.es/caict/ingterr/ventajasAVE-BurgoSantander.pdf

domingo, 22 de noviembre de 2009

Burgos 2 - Junta de Valladolid 0


Asistimos estos días a un hecho que, desde fuera puede ser banal pero para nosotros es algo prácticamente inédito y casi histórico. A simple vista hemos visto que la Caja de Burgos ha dicho no a su fusión o, mejor dicho, absorción con Caja Duero y Caja España. Una decisión empresarial que seguramente habrá roto muchas quinielas, entre ellas mis apuestas y que nos ha sorprendido por su contundencia. Pero dejando de lado las razones de José María Arribas sobre su "tira y afloja", las ventajas y desventajas para Burgos y la jugada política del PSOE y el PP que dió al traste la fusión, lo que me ha sorprendido es que por una vez en Burgos se ha discrepado con algo importante en muchos años. No puedo concretar las razones exactas de lo sucedido puesto que por mucho que nuestros políticos y dirigentes de la entidad se explayen en los medios de comunicación, los discursos de siempre no me llenarán nunca. Sin embargo contemplar el cabreo de la Junta de Castilla y León y de sus medios afines indica que los consejeros de la caja han obrado en contra de sus superiores y tal cosa me llena de gozo y satisfacción, como diría aquel monarca.


Tal enfado deja perplejos a muchos burgaleses. Quizás muchos creían que desde otras provincias serían comprensivos con la decisión de la entidad pero enseguida surgieron las descalificaciones y amenazas; nuestro ex-paisano Herrera advirtió que el rechazo «tendrá consecuencias inmediatas», el vicepresidente y consejero de economía, Don Tomás Villanueva reaccionaba amargamente con un «ellos tendrán que dar explicaciones a los ciudadanos y a las autoridades monetarias del país» y los medios de comunicación atacaban indiscriminadamente a los burgaleses acusándonos de lo de siempre, provincianos y egoistas y, como novedad, rencorosos por lo del tema de la capitalidad, como dejó entrever un tal Ignacio Fernández Sobrino, director regional de Onda Cero que junto a otros paisanos sacaron los colores de Arribas en una entrevista-interrogatorio de la televisión vallisoletana de Méndez Pozo. Quizás, el que menos me sorprendió fue José Antonio de Santiago-Juárez, el famoso señor "si-o-si" que, sumando puntos a su marcador dijo sobre las dos cajas fusionadas que «han decidido mirar al futuro, buscar fórmulas para resolver los problemas de las generaciones venideras» mientras que «hay otras cajas que parece que siguen enredadas en el pasado» en relación a Caja de Burgos. Su discurso más que portavoz de la Junta se diría que es de Jefe Provincial del Movimiento.




Desgraciadamente no podemos cantar victoria tan pronto puesto que quien tiene la sartén por el mango es el gobierno autonómico que, sin ir más lejos, es quien acota el terreno de las fusiones de cajas y no deja a la Caja de Burgos buscar otras entidades con las cuales poder negociar acuerdos de fusión interregionales o cualquier otra fórmula que pueda contentar a la entidad sin perjudicar sus intereses. A modo de ejemplo se diría que la Junta es un carcelero que deja a la Caja de Burgos pasear por el patio de la prisión pero impide su salida al exterior. Seis son las entidades que hay en el charco, o hablas con ellas o con nadie más. Y eso seguro que Caja Duero y Caja España lo sabían muy bien cuando negociaban las condiciones de la fusión à trois.

¿Cual será el futuro? ¿Fusión con Caja Segovia y Caja de Ávila? Quizás. ¿Con Caja Cantabria o la ínfima CajaRioja? Lo dudo mucho. ¿Y con Cajacírculo? Bien y mal. El futuro debería estar marcado por decisiones tomadas en Burgos, a beneficio de la sociedad burgalesa y tuteladas por el Banco de España. Las decisiones políticas y sobretodo las decisiones de políticos ajenos a Burgos son lo que menos conviene a las dos caja de ahorros. Por el momento se ha ganado una batalla de una guerra que es posible que no haya hecho más que empezar.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Todo lo que usted siempre quiso saber sobre la Diputación de Burgos y nunca se atrevió a preguntar


La diputación provincial de Burgos es una institución semidemocrática de elección indirecta que tiene su origen legal en la constitución de Cádiz de 1812 que ya establecía la división del pais en provincias y los gobiernos provinciales. Para ser más exactos, su fundación se remonta al 25 de septiembre de 1813, fecha de la primera sesión de esta institución, heredera de la Junta Superior de la Provincia de Burgos y, a su vez, de la embrionaria Intendencia de Burgos. Tras años de convulsiones políticas que hacen aparecer y desaparecer a las diputaciones, los límites territoriales provinciales son fijados por Javier de Burgos en 1833 y los partidos judiciales un año más tarde conformando así, más o menos, lo que a día de hoy entendemos por la provincia de Burgos.

La función de la diputación es, a simple vista, gobernar y administrar una provincia. Si profundizamos en sus competencias veremos que en verdad se trata de un órgano local básicamente funcional que presta servicios a los municipios y coordina y los asesora en aspectos de caracter supramunicipal. No es imposible la delegación de otras competencias por parte de las comunidades autónomas a las provincias pero en el caso de Castilla y León su estatuto es más restrictivo en esta cuestión que otros estatutos autonómicos.

Pero, ¿como se escoge a los diputados provinciales? Lo intentaré explicar brevemente. El origen de éstos está en las elecciones municipales y en los partidos judiciales que componen a la provincia. Al ser Burgos una provincia de menos de 500.000 habitantes le corresponden por ley 25 diputados provinciales escogidos proporcionalmente de los partidos judiciales. La distribución de los diputados entre los partidos políticos la realiza la Junta Electoral Provincial en el décimo día posterior a las elecciones municipales, de acuerdo con un criterio de proporcionalidad (Ley D'Hondt) y atendiendo al número de habitantes de cada partido judicial:


Cada partido político realiza unas listas en las que colocan por cada partido judicial a sus candidatos a diputados provinciales. La elección de candidatos responde a criterios internos de cada partido político puesto que la ley tan solo contempla la presentacion de listas por grupo político. En el caso del PP y el PSOE de Burgos, los presidentes comarcales en principio suelen encabezar estas listas tras unas "primarias" realizadas entre los concejales de sus respectivas divisiones comarcales aunque luego internamente pueden hacer y deshacer. Si nos fijamos en el mapa, el partido de Briviesca tiene 2 diputados más, detraidos al de Burgos. No sé a que responde esto pero se traduce en que un voto en el partido de Briviesca vale el triple que en otros partidos judiciales y en cambio en el de Burgos proporcionalmente vale menos ya que de 15 pasa a 13 diputados.

Al margen de todo el tema es el siguiente: ¿es consciente un votante de unas elecciones municipales de que está votando indirectamente a un diputado provincial? Mi opinión es que muy poco. En unas elecciones municipales en principio votamos al partido político que nos conviene y en Burgos, donde la mayoría de municipios son de escasos habitantes, otorgamos el voto más a la persona que encabeza la lista que al partido político. Es decir, existe la posibilidad de que queramos un representante diferente para nuestra alcaldía y para la diputación provincial pero nos veamos obligados a aupar a alguien que no queremos en alguna de las dos instituciones, sobre todo en la que estoy hablando.

Es posible que la Diputación de Burgos no sea del todo el paradigma de la autogestión que muchos deseamos para la provincia pero es muy importante que su composición sea plenamente democrática puesto que así su eficiencia resultaría mucho mayor. El esquema de antes refleja que los llamados alcaldes-diputados son los que controlan sus órganos de gobierno y en la provincia con mayor número de municipios de España es normal que, a veces, en la elaboración de los presupuestos cada uno barra para su casa. Un alcalde se debe a su pueblo en el ayuntamiento pero también a los otros 371 en la diputación y esto es dificil de separar cuando hay carencias en toda la provincia y hay que dar un orden de prioridad. De esto último se podría hablar largo y tendido.

Por último señalar que de las ocho provincias que nos rodean, en cuatro no existe esta institución ya que dos son autonomías uniprovinciales y las otras dos son diputaciones forales. Y todas ellas son plenamente constitucionales y más democráticas que cualquier diputación provincial puesto que sus ciudadanos escogen directamente a sus representantes en unas elecciones por no hablar de la variedad de competencias que tienen cada una. Pero eso ya es otra historia.

jueves, 24 de septiembre de 2009

Autopista Dos Mares o "El Capricho de Revilla"


Existe en la localidad cántabra de Comillas una de las pocas obras con las que Antonio Gaudí obsequió al mundo fuera de su Barcelona modernista. Se trata de una casita (hoy restaurante) concebida como torre de recreo para el cuñado del Marqués de Comillas pero que debido a sus proporciones y ornamentación de estilo oriental cumplía con demasía la función otorgada para la única persona que la habitaría. De ahí su nombre: El Capricho.

Del mismo modo y 125 años después, el influyente presidente de la comunidad cántabra, simpático hablador y monclovita Miguel Ángel Revilla, en una de sus ocurrencias, está impulsando la realización de una autopista de peaje llamada "Dos Mares" o AP-69 que discurriría en diagonal descendiente desde las inmediaciones de Reinosa hasta Miranda de Ebro, atravesando en la mayoría de su recorrido la provincia burgalesa y partiendo por la mitad al Valle de Tobalina. La razón de la realización de esta infraestructura es básicamente la de enlazar las vias cantábricas con la zona del mediterraneo y levante de una forma directa.

Se da la circunstancia de que en estos momentos se están realizando sendas obras que, si todo va bien, acercarán de igual manera Cantabria al este del pais. Me refiero a la "Supersur" de Bilbao o futura BI-30 y la autovía de Burgos a Aguilar de Campoo o futura A-73. Frente a estas vias, la Dos Mares supone menos de 20 minutos de ahorro yendo por Aguilar y ninguno utilizando la variante vizcaina, segun datos de la Plataforma contra la Autopista Dos Mares. Además las dos alternativas carecen de peaje. Y es aquí donde radica su inutilidad.

Lo que no se dice en los medios son los delirios de Revilla por la construcción de una alternativa que impida el paso del tráfico cántabro por el Pais Vasco. Y si es preciso pasar por otra provincia de cuyo nombre no quiere acordarse atropellando zonas de alto valor ecológico y ninguneando a las Merindades pues se hace.

Desde mi punto de vista burgalés esta autopista no nos beneficia en nada. Es más, es una burla a sumar a las demandas históricas de comunicar Santander, las Merindades y Burgos con una vía de alta capacidad. Y para Burgos es una pieza más en el puzzle de la perdida de centralidad que supone su ubicación. La A-73, la AP-69, la A-67,... todo sea con tal de no llegar de la Meseta al Mar por el paso utilizado durante siglos y siglos: el puerto del Escudo. Nada es imposible. Imposible era la construcción de una autopista a Asturias por Pajares debido a sus desniveles y orografía pero ahí la tenemos. Imposible era la financiación de una autopista que fuese de Bilbao a Zaragoza y al final se pudo hacer. Como siempre y desde hace casi tres décadas, llegamos tarde a todo.

En lo que nos queda de año podríamos presenciar la licitación de la autopista a la concesionaria privada que se encargaría de su construcción gestión y conservación. Por la inutilidad, por el alto coste ecológico y por dignidad, desde este blog me opongo a la construcción de la autopista, un auténtico capricho de Revilla que tendremos que soportar. Y, como no, contando con el beneplácito de "nuestros políticos". Si quereis saber más, entrad en el blog "ap69 no gracias"

sábado, 11 de julio de 2009

Por una radio y una televisión públicas

Si mirais abajo del todo de este blog vereis un banner reivindicativo que puse para pedir la creación de un centro territorial de RTVE en Burgos. Puede parecer una tontería pero no lo es y hoy voy a explicar el por qué. Primeramente decir que RTVE es un ente público que pagamos mediante impuestos entre todos los españoles, burgaleses incluidos, pero que por desgracia no cumple su papel de informar en igualdad de condiciones especialmente en nuestra provincia.

El centro al cual estamos adscritos, RTVE en Valladolid, informa de nuestra provincia de manera arbitraria y esporádica. Pero esto no es culpa de los informadores vallisoletanos sino que se basa en la cantidad de provincias que posee esta comunidad autónoma y la imposible tarea de atender a todas por igual. De hecho, la mayoria de las noticias se reducen a indicadores globales que atañen a toda la autonomía como son el paro, el precio del trigo o el tráfico en las carreteras. Las noticias concretas a una ciudad o provincia son escasas y si se dan es primando su importancia desechando a las otras 8 que pudiese haber en cola. He estado comprobando los informativos desde el 24 de junio hasta el 9 de julio a la búsqueda de noticias de Burgos. He aquí el resultado:




Comprobamos que en tres semanas de informativos, las noticias que pasan en Burgos se resumen a la central nuclear de Garoña, la visita de la Reina a Atapuerca junto a la inauguración del CENIEH o la lucha del Mirandés por subir a 2ªB. Por lo menos de las dos primeras noticias en medios nacionales también nos hubiésemos enterado pero con lo del Mirandés han tenido todo un detalle. El resto de noticias deben de ser de Burgos, razón de más para que no aparezcan en un informativo que se hace llamar Noticias de Castilla y León.

En el otro extremo de la balanza están los informativos territoriales de Cantabria o La Rioja llamados Telecantabria y Telerioja respectivamente, donde todas sus noticias tratan íntegramente temas de sus territorios. Especialmente llamativo es el caso de Telerioja donde dan más noticias incluso que en el informativo de Castilla y León comprendiendo a tan sólo una provincia. Y, aunque no sean de una importancia inusitada, dichas noticias no dejan de ser las que más interesan en sus comunidades.

Volviendo a nuestra tierra, la importancia de radicar el centro de TVE en Valladolid fue muy significativa ya que los informativos pasan por el tamiz de aquella tierra y se nos sirven las noticias digeridas y al gusto de la junta vallisoletana. Esto sucedió antes de la creación del ente autonómico, lo cual indica que el diseño de la comunidad autónoma estaba más que claro por el estado central antes de su propia creación. En el libro Castilla y León. El proceso autónomico del investigador vallisoletano Mariano González Cavero y publicado por la sufrida Fundación Villalar se menciona que Valladolid se había anotado un importante tanto al hacerse con la sede permanente del centro de RTVE a modo de competición por la capitalidad autonómica cuando las cosas en verdad ya estaban bien pensadas. Prueba de ello es lo que sucedio con la otra cara de esta moneda: la radio pública.

Una vez ubicado el centro de TVE era necesario crear un centro territorial para Radio Nacional en Castilla-León y para compensar a Burgos, se aprovechó la renovación tecnológica de la comunidad autónoma con la decisión de colocar en nuestra capital el centro territorial de RNE en Castilla y León. Esto ocurría en 1984:

http://www.elpais.com/articulo/Pantallas/ESPANA/TELEVISION_ESPANOLA_/RTVE/Radio/Nacional/acaba/zona/sombra/Castilla/Leon/elpepirtv/19840318elpepirtv_5/Tes

Lamentablemente cuatro años después y con Aznar al poder en la junta vallisoletana se le arrebató a Burgos este pequeño privilegio:

http://www.elpais.com/articulo/Pantallas/BURGOS/BURGOS_/MUNICIPIO/CASTILLA_Y_LEON/ESPANA/RADIO_NACIONAL_DE_ESPANA/Protestas/traslado/Valladolid/centro/RNE/Castilla/Leon/elpepirtv/19881021elpepirtv_5/Tes

Y hoy en día, ya ni siquiera existen noticias provinciales de Burgos puesto que con la reforma de RTVE se centralizaron los informativos a uno por autonomía. Eso, a no ser que nosotros no queramos y lo demostremos donde más les duele; las urnas.

jueves, 2 de julio de 2009

El detonante: las cajas


La sociedad burgalesa ha permanecido pasiva durante muchos años a la evolución de la autonomía castellanoleonesa. A diferencia de un catalán, un vasco o un andaluz donde la identificación con la región va implícito con su gobierno autonómico, la autonomía de Castilla y León para un burgalés es un administrador común que gestiona los recursos de 9 provincias y cumple a rajatabla lo otorgado en un estatuto consensuado amablemente con el poder central, tan criticado en su día por los que hoy lo suplantan.

El vínculo identitario de un burgalés con un zamorano, un pacense o un murciano es el mismo antes que después de 1983; pertenecen a una misma nación y no hay distinción entre "castellanoleonesidad" y "extremaduridad" o "murcianidad". El gobierno de Castilla y León ha gastado ingentes cantidades de dinero en la construcción de esa identidad castellanoleonesa puesto que la base de la autonomía requiere de un trasfondo identitario que nos una en base a lo común. Artefactos tales como la Fundación Villalar, donde se descubre en todos y cada uno de nosotros nuestros orígenes "comuneros" o la oportuna confusión de Castilla y León con la Corona de Castilla y León son claves para la continuidad de la mentira, una pantomima de algo que creían que había cuajado. O al menos eso creían.

Antes de proseguir pensad por un momento en esto: ¿Donde se ha visto una manifestación ciudadana en apoyo a unas cajas de ahorro? Creo que en ningun sitio y si yo fuese Juan Vicente Herrera estaría muy preocupado por todo lo que deriva de ello. ¿Es que acaso nuestras cajas de ahorro no son también Caja España o Caja de Ávila? ¿Por qué este alboroto cuando se trataba de fortalecer a la región creando para ello un músculo financiero?

Al poco de escribir estas lineas se ha creado en Cataluña una Unión de cajas catalanas que va a integrar los negocios de tres o cuatro cajas catalanas y paralelamente otras tres cajas están en conversaciones para su fusión. Lo mejor de todo es que no parece que vayan a haber muchas manifestaciones contrarias a estos movimientos y, paralelamente como sucedió en nuestra comunidad, la Generalidad catalana prima a las fusiones comprendidas entre entidades de su territorio.

A las cajas burgalesas se las puede acusar de ser ladronas, insolidarias o maleducadas, no es algo exclusivo de estas dos cajas. Pero la principal diferencia con las demás es que son nuestras cajas y éstas más que otras representan la identidad económica de los burgaleses puesto que gestionan casi tres de cada cuatro euros de la provincia entre las dos. Por eso salieron muchos a la calle, unos por hartazgo y otros porque ya veíamos venir los planes de la Junta, la cual esta vez había sobrepasado el límite de la paciencia de los burgaleses. Esta vez quedó demostrado que ganamos un pulso a Valladolid con la unión de todos y fuimos nosotros los que dimos al traste los planes de la junta. Nosotros contamos con nuestra voz y nuestro dinero y ellos con el poder y la coacción política. Veremos a ver quien gana al final.

jueves, 18 de junio de 2009

Tenemos los gobernantes que merecemos ¿o no?

Muchas veces se nos ha acusado a los castellanos de Burgos de ser unos egoistas y unos pretensiosos por guardar ciertos recelos en el antagónico tema de la capitalidad de Castilla y León. Atrás quedán ya aquellas manifestaciones de la Junta Pro-Burgos Cabeza de Castilla con el abogado José María Codón a la cabeza acompañado del eterno José María Peña, alcalde entonces de Burgos exigiendo la capitalidad de la autonomía de Castilla-León ante el reciente despropósito de trasladar la sede a Valladolid. Amenazas, ruegos y proclamas ante el Valladolid silencioso que había hecho las cosas con precisión de cirujano y dejaba enfriar tranquilamente la tarta autonómica de una región hecha a su justa medida. El Valladolid conciliador agrupaba todo para que las provincias egoistas no echasen por tierra el proyecto castellano-leonés. Luego vinieron las migajas; Tribunal Superior de Justicia a Burgos (no completo), Procurador del Común a León, el Consejo de Cuentas a Palencia, el Consejo Consultivo a Zamora,... estos eran-son los llamados criterios de descentralización que cimientan el estatuto autonómico. Sin embargo el primigenio gobierno autonómico de aquella autonomía no era una amenaza para ninguna provincia puesto que no había un gran interés en regular y avanzar en el desarrollo autonómico; muchas mentiras y esfuerzo habían costado ya sólo el hecho de conformar la autonomía. He de recordar que si sus habitantes estaban poco interesados en el desarrollo autonómico, sus gobernantes no eran menos, pero el paso del tiempo hace inevitable la regulación de todos los ámbitos competenciales ya sea por deseo expreso del gobierno castellanoleonés o por obligación estatal.

Y de ayer nos plantamos en hoy. Después de cuatro reformas estatutarias el tumor se ha hecho grande y poderoso; ya no es aquel estatuto de 1983 que sirvió de base para unir a 9 provincias sin pisarse unas a otras sino que hoy controla muchos aspectos de la vida de sus ciudadanos de manera unitaria. Niega nuestra identidad y encaje en la España de las autonomías y confiere a cualquier tipo de protesta puntual una señal de localismo desfasado e ignorancia secular con la complicidad de los medios de comunicación subvencionados y tapados. La sed de poder abarca ya a los políticos de nuestra tierra, los cuales después de casi tres décadas han asumido su rol castellanoleonés y obedecen sin queja a la Madre Junta que los amamanta puntualmente y los recoje en sus Cortes cuando las provincias se les hacen pequeñas. Pero también hay que decir que después de varios agravios y la acumulación de despropósitos cometidos contra nuestra provincia muchos de nosotros dudamos de estar aquí y pensamos que la mayoría de edad puede estar ligada a la emancipación. Tenemos razones como el que más. Para bien o para mal, pensemos todos en ello.

miércoles, 3 de junio de 2009

Castilla la Vieja borrada del mapa


Desde el inicio de la Transición, España ha sufrido una metamorfosis única que lo ha llevado de ser uno de los más centralizados a ser de los más descentralizados en el mundo democrático. Regiones, nacionalidades, naciones, autonomías,... llamémoslos como queramos, han asumido el papel de la gobernabilidad de sus respectivos territorios administrando desde la educación hasta la sanidad pasando por variopintas competencias, eso si, limitadas por la constitución de 1978. Unas se constituyeron por motivos nacionales y culturales, otras por afinidad geográfica, otras por intereses económicos y algunas fracasaron en su intento. Incluso existen autonomías que luchan hoy en día por desalojar el papel del estado de su comunidad, demandando ya competencias que estan fuera de su alcance constitucional y acercándose a la frontera del estado federal, de la cual no estan ya muy distantes.

En 1976 en la provincia de Burgos la autonomía no era una demanda especial. Después de casi 40 años de franquismo la llegada de las libertades democráticas eran recibidas de manera pacífica y racional donde por fin todos los españoles pensáramos lo que pensáramos podriamos al fin abrazarnos en libertad de derechos y las disputas entre izquierda y derecha se dirimiesen democráticamente en un parlamento representativo. Ley de amnistía, libertad de pensamiento, retorno del exilio era algo esperado por muchos. No así la configuración de la España de las autonomías.

Los estatutos de autonomía, para qué vamos a negarlo, es demanda especial de tres y si me apuran de dos, esto es, Cataluña y Pais Vasco. En estas comunidades la tradición autonómica entronca directamente con los estatutos de la Segunda República y el sentimiento permaneció escondido durante los años de la dictadura para florecer de nuevo como una gran demanda social que demostró mediante manifestaciones y otros actos la necesidad de la autonomía.

Mientras esto pasaba, los flamantes representantes políticos de los burgaleses, seguros de si mismos y con la autoridad que les daba esta tierra se iban posicionando sobre la ubicación de la provincia en el mapa autonómico. ¿Cuales son las provincias que Burgos debería gestionar como Cabeza de Castilla que es? La idea de Castilla la Vieja era ya algo desfasado y el proyecto debía engrandecerse juntando a León con Castilla. Primero el instituto castellano-leonés, luego el consejo general de castilla y león ya sin Logroño ni Santader y con la resistencia de Segovia y finalmente la autonomía, acabaron con las aspiraciones de Burgos que pasó de liderar a ser dirigida por la batuta vallisoletana; el engaño había funcionado a la perfección. Pese a todos los esfuerzos el sentimiento confundido y la cesión y sacrificio identitario de los burgaleses nunca se verían compensados. ¿Cual es la verdadera finalidad de Castilla y León? Eduardo Moreno Diaz, diputado de UCD por Valladolid, decía lo siguiente en la multitudinaria manifestación pro-autonomía de marzo de 1978: queremos la autonomía para Castilla y León, porque durante muchos años hemos sido victimas del poder central.

martes, 2 de junio de 2009

El Autonómico da sus primeros pasos

Os doy la bienvenida a este blog, uno más de los existentes sobre Burgos pero quizás uno de los primeros en centrarse en un nuevo rumbo político que algunos necesitamos. Un golpe de timón en las bitácoras burgalesas que va a hacer gala de su nombre exponiendo las verdades y mentiras a las que estamos sometidos día tras día y proponiendo de una forma tranquila a la sociedad castellana de Burgos un nuevo camino a elegir. Sin miedo pero con cautela trataré el encaje de Burgos en la realidad contemporanea de España y el posible alcance de un tren que partió sin nosotros hace 26 años.