
Asistimos estos días a un hecho que, desde fuera puede ser banal pero para nosotros es algo prácticamente inédito y casi histórico. A simple vista hemos visto que la Caja de Burgos ha dicho no a su fusión o, mejor dicho, absorción con Caja Duero y Caja España. Una decisión empresarial que seguramente habrá roto muchas quinielas, entre ellas mis apuestas y que nos ha sorprendido por su contundencia. Pero dejando de lado las razones de José María Arribas sobre su "tira y afloja", las ventajas y desventajas para Burgos y la jugada política del PSOE y el PP que dió al traste la fusión, lo que me ha sorprendido es que por una vez en Burgos se ha discrepado con algo importante en muchos años. No puedo concretar las razones exactas de lo sucedido puesto que por mucho que nuestros políticos y dirigentes de la entidad se explayen en los medios de comunicación, los discursos de siempre no me llenarán nunca. Sin embargo contemplar el cabreo de la Junta de Castilla y León y de sus medios afines indica que los consejeros de la caja han obrado en contra de sus superiores y tal cosa me llena de gozo y satisfacción, como diría aquel monarca.
Tal enfado deja perplejos a muchos burgaleses. Quizás muchos creían que desde otras provincias serían comprensivos con la decisión de la entidad pero enseguida surgieron las descalificaciones y amenazas; nuestro ex-paisano Herrera advirtió que el rechazo «tendrá consecuencias inmediatas», el vicepresidente y consejero de economía, Don Tomás Villanueva reaccionaba amargamente con un «ellos tendrán que dar explicaciones a los ciudadanos y a las autoridades monetarias del país» y los medios de comunicación atacaban indiscriminadamente a los burgaleses acusándonos de lo de siempre, provincianos y egoistas y, como novedad, rencorosos por lo del tema de la capitalidad, como dejó entrever un tal Ignacio Fernández Sobrino, director regional de Onda Cero que junto a otros paisanos sacaron los colores de Arribas en una entrevista-interrogatorio de la televisión vallisoletana de Méndez Pozo. Quizás, el que menos me sorprendió fue José Antonio de Santiago-Juárez, el famoso señor "si-o-si" que, sumando puntos a su marcador dijo sobre las dos cajas fusionadas que «han decidido mirar al futuro, buscar fórmulas para resolver los problemas de las generaciones venideras» mientras que «hay otras cajas que parece que siguen enredadas en el pasado» en relación a Caja de Burgos. Su discurso más que portavoz de la Junta se diría que es de Jefe Provincial del Movimiento.
Desgraciadamente no podemos cantar victoria tan pronto puesto que quien tiene la sartén por el mango es el gobierno autonómico que, sin ir más lejos, es quien acota el terreno de las fusiones de cajas y no deja a la Caja de Burgos buscar otras entidades con las cuales poder negociar acuerdos de fusión interregionales o cualquier otra fórmula que pueda contentar a la entidad sin perjudicar sus intereses. A modo de ejemplo se diría que la Junta es un carcelero que deja a la Caja de Burgos pasear por el patio de la prisión pero impide su salida al exterior. Seis son las entidades que hay en el charco, o hablas con ellas o con nadie más. Y eso seguro que Caja Duero y Caja España lo sabían muy bien cuando negociaban las condiciones de la fusión à trois.
¿Cual será el futuro? ¿Fusión con Caja Segovia y Caja de Ávila? Quizás. ¿Con Caja Cantabria o la ínfima CajaRioja? Lo dudo mucho. ¿Y con Cajacírculo? Bien y mal. El futuro debería estar marcado por decisiones tomadas en Burgos, a beneficio de la sociedad burgalesa y tuteladas por el Banco de España. Las decisiones políticas y sobretodo las decisiones de políticos ajenos a Burgos son lo que menos conviene a las dos caja de ahorros. Por el momento se ha ganado una batalla de una guerra que es posible que no haya hecho más que empezar.
¿Cual será el futuro? ¿Fusión con Caja Segovia y Caja de Ávila? Quizás. ¿Con Caja Cantabria o la ínfima CajaRioja? Lo dudo mucho. ¿Y con Cajacírculo? Bien y mal. El futuro debería estar marcado por decisiones tomadas en Burgos, a beneficio de la sociedad burgalesa y tuteladas por el Banco de España. Las decisiones políticas y sobretodo las decisiones de políticos ajenos a Burgos son lo que menos conviene a las dos caja de ahorros. Por el momento se ha ganado una batalla de una guerra que es posible que no haya hecho más que empezar.
Ha sido una batalla ganada, Autonómico: Me parece que en esta ocasión ha prevalecido el sentido común y principalmente empresarial de CajaBurgos en la decisión de no fusionarse con otras,ya que si lo hubiesen hecho, les hubiese supuesto una auténtica sangría de retirada de efectivo en beneficio de Cajacírculo.Personalmente creo que en este asunto debe ser el libre mercado el que decida el camino a seguir, y no los políticos que con tanta ignorancia han sido golpeados por esta crisis económica.Su código genético, ejem,les impulsa a vengarse de esta decisión, y lo veremos con el tiempo.
ResponderEliminarQuizás no se den cuenta que esto podría ser el principio, y que los siguientes pasos de Burgos, puedan ser exigir la uniprovincialidad,reclamar enérgicamente nuestra Facultad de Medicina, exigir esos parques tecnólogicos y polígonos industriales retenidos por el centralismo que nos abruma.
Hay selección
Ojalá algún día podamos ver como alguien pide la segregación de este engendro. Lo veo dificil pero sigo soñando con ello.
ResponderEliminarLa sociedad burgalesa tendría que implicarse más y mostrar su cabreo contra los desprecios que se nos hace desde ya sabéis dónde (da grima hasta nombrar esa ciudad).
Creo que esto es un guerra, si. Que hemos ganado una batalla pero ellos han respondido abriendo en el centro de oncología allí dónde se ha ido a vivir el ex-burgalés mentiroso y traidor. Y lo peor es que no van a parar sus ataques hasta que no consigan anular nuestra identidad burgalesa.
Creo que al menos de lo que podemos estar contentos es de haber hecho frente seriamente a una decisión política de la Junta por una vez. Si miramos estos años atrás es algo que no se había producido y que conste que los máximos exponentes de Burgos ciudad y provincia, Aparicio y Vigara no han movido ni un dedo en este asunto. Si el asunto ha salido bien es por una carambola política en el seno de la entidad. Ha sido una guerra en la calle o, mejor dicho, en los bares. Aun espero de verdad ver ese malestar algun día por boca de un representante en un pleno del ayuntamiento, de la diputación y en las cortes de Valladolid. Atapuerqués: ¿Facultad de Medicina?,¿Parque tecnológico?... coja número y póngase a la cola.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con los tres. Pero mi reflexión es un poco distinta. Es una verdadera pena que celebremos el quedarnos como estábamos. ¿Qué se ha conseguido que no tuviéramos ya? Nada. Simplemente esta vez no nos han quitado. Y ese es nuestro triunfo, que por una vez hemos cambiado la dinámica de quitarnos cosas. Pero el análisis frío es que toda la lucha ha sido simplemente para quedarnos como estábamos. Así nos va en esta autonomía cada vez menos nuestra.
ResponderEliminarY ahora atacan con el consejo genético. ¿Será venganza? Yo de estos políticos cada vez me fío menos.
Algo es algo Uno de Quince que antes ni eso. Es triste pero es así. E insisto que a quien menos hay que dar las gracias es a "nuestros" políticos. Para defender esto y otras muchas cosas es necesario que un clamor así tenga su voz en verdaderos representantes de la provincia y no en los parias políticos que tenemos. Lo del consejo genético es algo que quedó aparcado, que no muerto, hasta que la gente se olvidase del tema. Y, como ves, de nuevo Aparicio y Vigara calladitos.
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